Según Rashida Tlaib, congresista estadounidense el asesinato de Shireen Abu Akleh, periodista y corresponsal de la cadena catarí Al Jazeera, es un “crimen de guerra”.

Akleh el día 11 de mayo de 2022 se encontraba reportaba una redada realizada por las fuerzas de ocupación israelí en la ciudad de Yenin, y es ahí donde recibe un disparo en el rostro que le causó la muerte minutos después.

Al respecto, Rashida Tlaib, congresista dijo durante una entrevista exclusiva con la cadena de televisión Al Jazeera, en la que Abu Akleh trabajaba, que los hechos se pueden considerar como un “crimen de guerra”.

Asimismo, hizo un llamado a su propio gobierno a obligar a Tel Aviv, a que respete los derechos humanos del pueblo palestino.

De igual modo, señaló que ha expresado su apoyo para que se realice una investigación que aclare los hechos en relación con el asesinato de Shireen Abu Akleh, es importante que Washington realice su propia pesquisa sobre el asesinato perpetrado por las fuerzas de ocupación israelí, además, mencionó que 10 congresistas más han solicitado la realización de una investigación sobre este asunto.

Precisamente Tel Aviv, realiza estos operativos ilegales con la protección de EE.UU. que veta cualquier iniciativa ante el Consejo de Seguridad de la ONU, que es el organismo que podría sancionarlo, pero la solidaridad automática de la Casa Blanca crea un manto de impunidad, y viola los derechos humanos y que se considera un “doble rasero”.

Los estadounidenses no han entendido que, si quieren seguir siendo considerados como el país de la libertad, no pueden seguir permitiendo hechos como este, es evidente que EE.UU. perdió desde hace décadas este titulo y eso si en algún momento lo tuvo de forma justa.

El sistema internacional se encuentra en sus niveles más bajo en términos de legitimación, organizaciones como la ONU son consideradas como obsoleta, creada tras el fin de la Segunda Guerra Mundial (SGM), con la intención de prevenir guerras, hambrunas y orden; pero la realidad es otra ya que no puede prevenir nada y no promueve ningún orden.

Es por ello, que sin temor a equivocarme es necesario y con urgencia una restructuración de la ONU, y se debe quitar el derecho a veto a estas 5 naciones que ganaron una guerra hace más de 70 años y han llevado al mundo entero al abismo.

¿Y tú qué opinas?