No sólo en América Latina se observa con asombra como salen sentencias a la carta, o simplemente no se dictan sentencias, en ocasiones los condenados son los inocentes y cuando algún culpable recibe sentencia (lo que muchas veces es fortuito) es para "dar ejemplo" y maquillar lo justo de la "injusticia".

Existen sobrados ejemplos en cuanto a lo injusto que resulta la justicia hoy día, vista esta desde el punto de vista de los inculpados, fiscales, peritos, abogados, jueces y jurados. Y mencionar los casos en específico no es asunto de esta reflexión, ya que los mismos ocurren por igual en Europa, Asia, Oriente, Oceanía y América.

Se fabrican pruebas, se fabrican testigos, se dirijan documentos, se pierden pruebas de juicios, se compran testigos o peor aún se mandan a asesinar para que no declaren, del habilita a especialistas y médicos y peritos de casos, se asignan abogados - jueces y fiscales a dedo según la conveniencia o no de las sentencias por dictar.

Esta nueva lúgubre moda de usar o utilizar la justicia con otros fines trae consigo el hecho de darle un sentido de imparcialidad, legalidad, sentido de bien común, pero nada más alejado de la realidad. Lo vemos reflejado en juicios en donde los grandes perdedores son: el medio ambiente, derechos civiles, derechos políticos, privatización de recursos renovables y no renovables, protección de patentes, plagio de inventos - fórmulas e ideas, en fin, el mejor postor a los intereses de los secuaces de la injusticia tendrá la sentencia a favor o en contra que desee.

Pero todo ello no se queda allí, más allá de los intereses económicos y comerciales que siempre han estado por encima de la ley, o debajo ella, o a su lado, o como parte de ella, ahora se ha empezado a utilizar a la justicia para intervenir en funciones de gobierno, procesos de elecciones, perdida de derechos y pérdida de la privacidad.

Mención aparte merecen la corrupción y los derechos humanos: es una fantasía pensar que ambos son parte inequívoca y con actores solo dentro de los miembros de un gobierno o personeros con funciones de estado, nada más alejado de la realidad, porque es fácil descifrar que:

1.- un acto de corrupción ocurre con participación de un funcionario de gobierno y de un empresario, porque sin la participación de alguno de ellos no existe el acto consumado de corrupción, entonces ¿Porque se pretende hacer ver que existe justicia solo si se castiga al funcionario de gobierno? el empresario que queda libre seguirá corrompiendo a todo funcionario de turno que le toque en un futuro hacer negociaciones mutuas.

2.- para el caso de los derechos humanos la situación es más complicada:

- existen los derechos humanos para los convictos, que usualmente están condenados por cometer un crimen, pero para las víctimas de esos crímenes ¿dónde quedaron sus derechos humanos?

- cuando ocurren escenarios de caos social, protestas y movilizaciones masivas, suele culparse a fuerzas de seguridad de estado por violación de derechos de los protestantes, pero cuando esas protestas son violentas o armadas y causan por igual daños, lesiones y muertes a civiles y cuerpos de seguridad ¿No están violando los derechos humanos de esas víctimas?

- se suele culpar a los gobiernos de los países y señalarlos por violación de derechos humanos, por razones diversas, pero todas tienen algo en común: se juzga solo a funcionarios de cabecera ¿Acaso los que siguieron órdenes y ejecutaron las mismas no violaron derechos humanos?

- y que podemos decir cuando organizaciones civiles, pacíficas o armadas, colectivos de personas, e incluso algunos movimientos y partidos políticos causan desestabilización, daños. materiales o físicos, lesiones e inclusive muertes ¿no violan derechos humanos de todas esas víctimas?

- ¿porque los derechos humanos solo de ven desde una sola perspectiva y se acusa solo a una sola parte de los causantes de su violación?

Nuestro mundo de justicia al parecer está a la venta para el mejor postor, haga sus apuestas y mueve sus fichas, que, las sea favorecido son consecuencias.