Scott Bessent, secretario del Tesoro de EEUU., indicó este jueves 20 de febrero a Bloomberg que Washington está dispuesta a suavizar las sanciones contra Moscú como endurecerlas, que todo dependería de los resultados de las negociaciones entre ambos países.

Al respecto, expresó que “el presidente Donald Trump se ha comprometido a poner fin a este conflicto muy rápidamente”, sentenció.

Por su lado, Elvira Nabiúlina, presidenta del Banco Central de Rusia indicó que “El Banco Central no participa en este tipo de negociaciones y no sé nada al respecto”, dichas declaraciones fueron dadas durante su participación en el foro “Ciberseguridad en las Finanzas”, que se celebró en la ciudad rusa de Ekaterimburgo.

Asimismo, es importante destacar que dichas sanciones son parte de la política unilateral e ilegal de sanciones de EEUU., contra países que no estén del mismo lado de Washington y sus aliados. Al respecto, países como Irán, China, Corea del Norte, Venezuela, Nicaragua entre otros; han sido sancionados y sin importar que esté de acuerdo o no con estos países o “regímenes” como a algunos les gusta nombrarlos, por el solo hecho de pensar diferente.

Lo que Trump no entiende es que la política de aranceles o sanciones a quién pone en peligro es al propio EEUU, ya que esto acelerará la necesidad de abandonar el dólar, siendo una moneda hostil para las economías del resto del mundo y grupos como los BRICS, MERCOSUR y la Unión Europea; llegarán en algún momento a un consenso para establecer la competencia contra la moneda “dólar”.

Con esto Trump pone en peligro el libre mercado, la globalización y la competitividad entre todos los países, solo teniendo como única armas de competencia la coacción y no la innovación, cuestión que ha caracterizado a EEUU, en los últimos 100 años teniendo gran parte de las 100 empresas más importantes con sede en Estados Unidos, pero que al día de hoy empresas chinas, algunas europeas y de otros países asiáticos; han arrebatado muchas posiciones importantes entre este Ranking de empresas exitosas.

Al respecto, Heather Conley del German Marshal Fund de Estados Unidos comentó que “nos adentramos en lo desconocido, asimismo, dijo que “No sólo aranceles y sanciones, sino también el uso de la política industrial y el proteccionismo para ayudar a proteger las economías futuras y la competitividad”.

Según estos comentarios toda esta política restrictiva es para posicionar a estado Unidos nuevamente como la primera economía mundial, que según algunas personas lo es, pero en lo personal sugiero que no lo es, siendo China la primera economía mundial, y para argumentar hasta las mayores empresas estadounidense fabrican en el gigante asiático, ejemplo, Apple, Nike y hasta la toda poderosa Testa; que pertenece a Elon Musk, integrante de la propia administración Trump.