La prevalencia del nuevo coronavirus en España se ha triplicado en las últimas tres semanas mientras que las autoridades luchan por contener una erupción de nuevos brotes, principalmente en las regiones de Cataluña y Aragón, según mostraron los datos del Ministerio de Salud el lunes.

Después de registrar miles de casos y cientos de muertes por día durante un pico de principios de abril, España logró ralentizar la cantidad de nuevas infecciones.

Pero desde que se levantaron las restricciones de movimiento y los españoles se relajaron en la vida cotidiana, han aparecido unos 201 nuevos grupos, con fuertes concentraciones en y alrededor de las ciudades catalanas de Barcelona y Lleida, según Reuters.

El índice de infección por coronavirus entre residentes en España ha aumentado de ocho casos por cada 100,000 habitantes a fines de junio, cuando terminó el estado de emergencia del país, a 27 por 100,000, dijo el lunes la subdirectora de emergencias sanitarias, Maria Sierra, en una conferencia de prensa.

Durante el fin de semana, se registraron 4.581 casos nuevos, con un total de 264.836, agregó. Más de 28,000 personas han muerto, reporta a Reuters.

"Donde las medidas se han relajado es donde aparecen estos brotes", dijo el ministro de Salud, Salvador Illa. "Estamos hablando de reuniones de familia extendida y espacios asociados con la vida nocturna".

Al describir la situación en Cataluña como preocupante, hizo un llamamiento a los residentes para que respeten las medidas de distanciamiento social que se mantienen para reducir el número de contagios.

El viernes, el gobierno regional catalán instó a unos cuatro millones de personas, incluidos los residentes de la segunda ciudad más grande de España, Barcelona, a quedarse en casa y evitar reuniones de más de 10 personas. También le dijo a bares y restaurantes que redujeran su capacidad.